2/10/14

En Cerro Bayo con la familia Catrilaf

Un nuevo viaje a la zona del campo con el objetivo de instalar una pantalla solar que provea de luz, y de un tanque de agua junto a la vivienda, conectado a una vertiente natural, para la familia de un poblador. Gente muy postergada que vive con mucho atraso. Hasta allí nos desplazamos, en plena precordillera, el grupo de trabajo. 8:30 hs estabamos en Cerro Bayo. Cada uno aportó su granito de arena, en pos del objetivo general. Eran las 16:30 del sábado, hora de volver a Mencué, nuestro centro de operaciones. Atrás quedaba una extensa jornada de trabajo compartida con la familia de Florencio Catrilaf. Él, junto a su hija y su nieto, extendieron su mano regalándonos un último saludo. Fue sentir una dulce caricia, una bendición. La de un Dios que nos ama intensamente como un Padre bondadoso. Y se nos manifiesta en los más pobres y humildes. Desandamos el camino con una paz increible, la de aquel que se siente amado. A mitad de camino nos bajamos de las camionetas buscando la altura de un cerro, como pretendiendo acercarnos más a Dios. Ya en Mencué celebramos la Palabra con la certeza que Dios nos invitaba a compartir con otros ese amor.

. Cena compartida en comunidad, largas charlas de amigos, hermanos, y a descansar.