Otro año hemos vivido juntos una semana santa intensa: domingo de Ramos muy popular, pascua de los enfermos con unción en un ambiente de maravillosa profundidad ante el misterio del dolor, el empequeñecimiento y la finitud; la misa del perdón en el año de la misericordia, la Cena del Señor, destacando la Iglesia más ministerial que estamos buscando y la hora santa para rezar; la pasión del Señor y el via crucis... Pero nada como la Vigilia Pascual, nuestra fiesta Patronal vivida a fondo y con gran alegría. El domingo cerramos con bautismos y dos eucaristías festivas. ¡Gracias a todos los que participaron y ayudaron a que esto fuera posible! ¡GRACIAS SEÑOR POR LA VIDA NUEVA!
Vigilia Pascual |