4/3/14

Fin de semana, solidaridad, el mejor carnaval!

Toda la semana estuvimos preparando los materiales: las pantallas solares, los soportes, el cemento, los cables, la arena, las maderas, enchufes, radio... No podía faltar nada, porque allá no se consigue nada, estás solo, lejos de todo... menos de Dios. Cecilia y Gustavo llegaron el viernes por la tarde desde Buenos Aires. Miembros de la Fundación Misión Marianista que se unían a la aventura. El Grupo de trabajo terminó de preparar los materiales y los vehículos.
Con los primero rayos del sol del sábado nos pusimos en movimiento: en el primer vehículo iban los visitantes, el humanista inglés Nick y el párroco; en el segundo los infaltables Juan Carlos, Martín, y dos jóvenes misioneros de la zona de Rincón del Manzano, Juan y Lilén, nuestro destino. Al mediodía nos recibieron en algunas señoras de la comunidad de Naupa Huen: misa, almuerzo compartido y revisión del microemprendimiento de forestación.
Por la tarde nos encontramos en la Casa de la familia Aria López. Nos esperaban Celestina y Esteban, y sus hijos Diego Fabi y Juanita. Les entregamos fruta donada y la ya tradicionales mantas de las tejedoras de Caritas. Hicimos juntos la instalación eléctrica: colocamos la pantalla (previo pozo), tendido de cables, colocación de fichas y focos, instalación de la radio y de un toma para cargar el celular. Otro armaron un pequeño mueble que amuramos a la pared y se le hizo un machimbre con aislante en la zona que se llovía de la cocinita donde se colocaron el mueble con la radio y la batería. Las chicas no dejaron de bailar hasta la hora de acostarse. cenamos juntos un chivito invitado por los anfitriones y adornado por una alegre charlar familiar todos juntos en la cocinita. Luego Vino el momento más emocionante: a la luz de nuevo farol instalado, se bautizó Estaba, con sus padrinos porteños, la presencia de su familia y de los misioneros. La luz eléctrica que significaba un verdadero cambio de vida para esta familia del final de l parroquia, aumentaba con la luz de la fe en el corazón del papá y de toda la familia que celebraba el amor de Dios.
A la mañana siguiente nos fuimos ala familia Martinez: Adolofo y su hijo nos recibieron y allí también hicimos instalación completa de luz y pantalla solar. Luego de un alegre asado de chivito compartido a la sombra de la enramada, nos dirijimos a la casa de la familia de Mariela (miembro de la Residencia Universitaria María Madre de la Juventud) y de Juli (miembro del Hogar San Cayetano), donde compartimos unos mates, y entre tanto, hicimos reparaciones en una vieja instalación eléctrica que le colocáramos cuatro años atrás.
Por un pequeño desperfecto no pudimos hacer la subida de Cerro Bayo donde queríamos visitar una familia más para ver qué se podía hacer en un futuro viaje. Pasamos por el Lago de Pichi Picún Leufú donde nos remojamos un poco y volvimos a Roca ya anocheciendo el domingo.
El lunes, no tan temprano nos dirigimos al paraje La Esperanza para compartir un asado con nuestros amigos Bernardo y Ana, y también para que nuestro ilustres visitantes conocieran en vivo y en directo el casco de una estancia tradicional de la Patagonia. Cordero acompañado de tortas fritas, preparadas por la familia que allí trabaja y vive. Mucha charla en la ronda del mate compartiendo experiencias de vida y del Reino.  Al volver, pasamos por El Cuy, donde Lika, su fundadora, nos mostró las instalaciones de MIlikilín Huitral ("mujeres tejiendo juntas"), donde las tejedoras elaboran sus artesanías de primera calidad. Nos contó y remarcó que más que el crecimiento económico, el primer fin de la Asociación y del trabajo conjunto, es el crecimiento humano en dignidad, especialmente para las mujeres, en una cultura de fuerte tinte machista. Desarrollar todas las potencialidades propias, crecer con otros, y "hacernos cargo de nuestra vida" asumiendo el protagonismo de la misma.
Al regresar, en la cena comunitaria con los religiosos marianistas, todos compartían sus sensaciones y sus primeros análisis de lo vivido. Un resume podría ser: Dios presente en los más pobres, y nosotros dichosos de poder servirlos aunque sea un poquito.

Familia Arias López y los misioneros
Colocando la pantalla solar


Preparando la cena

Detalle del mueble, la batería y la radio en la cocina

Las carpas para dormir

Agua y Luz, signos de la vida

Cena compartida

Bautismo de Esteban

Sus padrinos

Cantata de acción de gracias con la nueva luz

Agua bautismal para todos

Charla en familia