Tres jornadas con las tejedoras entrelazando sueños de calor y ternura hechos realidad. Horas de silencio, charla amistosa, festejo bullicioso, buenos mates y comidas compartidas. Horas llenas de familias y niños de catequesis que las visitan, acercan lanas, cosas dulces y muchas veces una mano para que sigan creciendo las mantas tita a tira. El ambiente invita a estar con ellas, mujeres de todas las edades, "sabias" la mayoría de ellas, que saben lo que es dar la vida por los demás, especialmente, por los últimos, a los que no les tocó el calor de la creación soñada por Dios para todos. Caritas Cristo fue la anfitriona y nos hizo sentir a todos parte de este proyecto. Las tejedoras ahora continuarán su labor silenciosa, a veces, en largas horas solitarias en sus casa,s sabiendo que cada manta las alarga hasta el último ranchito de la parroquia que este invierno tendrá más calor. Gracias por el testimonio, por las cinco mantas terminadas en estos tres días, y gracias por esa red silenciosa de amor que hace más presente al Reino.
Como dato puede servir el saber que el año 2012 se entregaron en la parroquia 54 mantas tejidas de este tipo, ¿Cuántas serán este año? Podés seguir apoyando este proyecto, acercate y averiguá.
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