La comunidad estaba reunida, los cantos animaron la celebración dándole un marco bien participativo.
Las familias acompañaron a sus hijos hasta el encuentro con Jesús, que a expresión de uno de ellos, lo que más lo había impresionado en estos dos años, es que descubrió que realmente Jesús era su "amigo y hermano".
También fueron acompañados por las chicas de la Residencia Universitaria. Para finalizar compartimos unas ricas tortas preparadas por una mamá de estos chicos, que hoy vivieron un día inolvidable, un día de Reino.